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Ian dividido entre el reguetón y la cocina


El juvenil exponente, quien lanzará su álbum “The Kid Capo, The Beggining”, delira por las artes culinarias.

Sin la intención de competir con Miguelito o Xavi, el raperito Ian Ramos López se abre paso en el reguetón con dos cartas bajo la manga.

Una es lanzar su disco, “The Kid Capo, The Beginning”, que saldrá a la venta a principio de octubre, y la segunda es convertirse en chef, porque también le encantan las artes culinarias.

Ian, de 12 años de edad, tiene claro lo que quiere en la vida. Aparte de fascinarle el reguetón, género en el que debutó hace cinco meses, delira por la cocina.

El estudiante de séptimo grado del colegio La Merced de Cayey cuenta un tanto tímido que desea destacarse en el campo de la música, por sus letras limpias basadas en las nenas y la fiesta.

Seguido, su mamá Yadira López, que lo acompaña en esta entrevista, lo interrumpe para agregar que “él hablará de los niños de su edad. No quiero que se piense que viene a competir con Miguelito”.

El cantante oriundo de Caguas promociona en la radio el tema “Amor de escuela” y confiesa a PRIMERA HORA que tiene una noviecita en la escuela, cuyo nombre se reservó.

Su primer tema en grabar ha sido “Debajo de sol” en el estudio La Perla Music. La letra ha sido creada por el rapero Bimbo, que es amigo de su mamá.

Otros que Ian ha grabado y estarán incluido en su álbum “The Kid Capo, The Beginning” son “Me quieren ver”, “Debajo del sol”, “Liga no dan” y “Furia”.

Respecto al título de la producción musical, Yadira López agrega que han utilizado la palabra capo, porque ya Miguelito es el boss, que significa jefe en español.

Tiene su receta de jueyes

Curiosamente, Ian tiene como pasatiempo ver programas de artes culinarias, por lo que no descarta convertirse en chef, ya que le encanta cocinar.

Tanto así que el raperito prepara varios platos a su corta edad, pero bajo la supervisión de su mamá.

El vocalista detalla cómo prepara su plato favorito que incluye jueyes.

En una olla grande, dice, deposita los jueves en agua con cebolla y ajo picadito, recao y sal hasta hervir por 45 minutos. Luego “los saco de la olla con un cucharón, los pongo en un plato y me los como. De ellos es que sale el sabor”.

Se la pasa viendo Food Network y quisiera aprender a crear recetas de postres.

Lo miran más las nenas

Con simpatía el niño indica que no teme a las críticas por llevar pantallas grandes, como la mayoría de los raperos veteranos.

La realidad es que hace tres semanas se perforó sus orejas para estar a la par con los cantantes del género y porque le gusta. Además, cuenta con el apoyo de su madre.

“Me gustan y no me dolió (cuando se las perforaron). Ahora me miran más las nenas”, sostiene quien luce las pantallas los fines de semana, pues no las puede lucir cuando va a la escuel

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